El Nuevo Vivero, con su auténtica selección

No visten de rojo ni juegan Europeos o clasificatorios de un Mundial. Portan el blanco y negro y disputan su tercer encuentro de la temporada en la nueva Primera RFEF. Ellos son la verdadera selección del Nuevo Vivero, el auténtico inquilino del coliseo pacense, que, pese a las quejas por tener que engalanarse un viernes, podrá dar cabida (19.00 horas) a todos sus abonados, unos 8.000. Cinco días después de la ilustre recepción a la selección española, regresa a Badajoz un viejo conocido, el DUX Internacional madrileño, con quien ya coincidieron los extremeños en la segunda fase de la pasada campaña.

El combinado de Alfredo Santaelena no ha arrancado demasiado bien la competición, tal vez fruto de lo tarde que se puso en marcha. Ocupa la posición 13 con un solo punto, el cosechado contra el Zamora CF. De momento, y en su corta trayectoria vital, este club del sur de la Comunidad de Madrid (Villaviciosa de Odón) encabezado por nombres muy sonoros como Thibaut Courtois y Dj Mario, ha dado más que hablar en lo virtual que en lo terrenal.

En la temporada pasada las dos veces que se cruzó en el camino de los pacenses no salieron airosos y los blanquinegros ganaron 0 a 2 en la ida y 1 a 0 en la vuelta. Un cuadro albinegro que ha perdido referentes en el plantel pero que sigue manteniendo su condición de clase noble, y más si es capaz de convertir su feudo en un fortín y de defender su hasta ahora imbatible meta. Limones no ha recogido todavía un balón desde dentro de la red.

Un Badajoz que, como apuntó este jueves su técnico, solo lamentará la conocida ausencia de Adilson. Los demás están todos disponibles, entre ellos el último en llegar, Truyols; y Dani Fernández, que ya ha entrenado con normalidad durante la semana. Dos futbolistas que otorgan a Óscar Cano más opciones en la zaga, la parcela más debilitada de efectivos a priori. Mientras, en el DUX Internacional no estarán Kolderiu, con molestias en el codo; y Kenneth, a causa del aductor.

«La semana fue muy bien. Vamos recuperando gente en su mejor estado y a otros les queda un poquito más, pero siempre tengo que resaltar la predisposición de estos chicos. No hay sesión de entrenamiento en la que no me enamore porque no veo a ningún jugador que trate de escatimar esfuerzos», valora el preparador granadino, que ya avisa de que ahora con partidos los viernes habrá que organizar semanas diferentes a lo habitual si bien remarcó que eso no tiene que repercutir en el rendimiento de una plantilla joven como la suya.

Respecto al rival, Cano señala que todavía es pronto para hablar de urgencias. «Acabamos de empezar y todo el mundo tiene sus necesidades y quizá ansias por tener esos puntos que te dan tranquilidad para trabajar, pero nadie tiene urgencia o una necesidad imperiosa. Será un equipo difícil, con gente experta que maneja bien los partidos, gente que ha jugado en Primera o que han pertenecido a canteras importantes. Es un buen equipo».

«Nuestra idea es que todos perciban la sensación de que pueden ser titulares, porque, si no el cien por cien, al menos el 85 pueden serlo perfectamente. La idea es que haya mucha competencia y que nadie se lleve la camiseta a su casa», continúa sobre su propio plantel un Cano que no espera grandes cambios en el posible once.

Espetó también que su sueño hubiera sido entrenar al Barça de Messi, Xavi e Iniesta, por lo que se mostró sorprendido o incrédulo por abanderar ahora un Badajoz que tiene entre sus méritos dejar la portería a cero, aunque ese no sea el primer objetivo. «A mí me gusta jugar bien al fútbol, pero también ganar. Yo cuando gano el domingo me veo guapo el lunes y es la única manera de tener un buen comienzo de semana. Pero si me preguntan cómo ganar, evidentemente me gustaría ganar de una manera que me hiciese más feliz que de otra», dijo Óscar Cano, para quien el césped del Nuevo Vivero, como pudo comprobar la selección española, está «espectacular». De hecho, el técnico desveló que hasta los propios internacionales o el presidente Rubiales y directivos de la RFEF se lo comentaron, «que hacía tiempo que no jugaban en un campo tan bueno como este». Este viernes será pisado por su verdadera selección.

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