El CV Almendralejo renueva su pase de temporada

Un mes antes de que el campeonato entregue los boletines con las notas finales, el conjunto extremeño se ha asegurado un notable alto al certificar su permanencia de manera matemática y afronta el epílogo con el único propósito de subir al sobresaliente. En las cuatro jornadas que restan, pelear por la cuarta plaza es quizás el nuevo horizonte verosímil para poner el broche de oro a una actuación de mucho mérito. La matrícula de honor, el playoff, es un objetivo 'cum laude' fuera de órbita, en otra constelación.

Pero para calibrar la magnitud del hito, es necesario poner en perspectiva dirigiendo la mirada al ocaso del ejercicio precedente, con un equipo extremeño asfixiado por su perentoria coyuntura económica, que zarandeó con virulencia cada rincón de su trayectoria deportiva. Tras un verano plagado de incógnitas en el que se tomó la dolorosa determinación de sacrificar al equipo femenino para no comprometer la sostenibilidad de un frágil entramado presupuestario, el sénior masculino se reactivó por el empeño y trabajo de una directiva que se resistía a dejarlo caer pese a los múltiples avatares. Avivaron la llama de la historia de un club que con mucho esfuerzo resucitó la vigencia de una disciplina con arraigo en la capital de Tierra de Barros.

Pese a las dificultades, el rendimiento de los almendralejenses ha sido excelso, especialmente en su cancha, donde solo ha hincado la rodilla ante el Villena Petrer hace dos jornadas poniendo fin a una racha invicto como anfitrión que se prolongaba más de un año. En febrero de 2024 se inauguró una comunión entre el pabellón San Roque y una afición cada vez más numerosa que fortaleció las prestaciones del equipo convirtiéndose en un vivero de puntos. En el feudo de la escuadra extremeña se han forjado los sólidos anclajes de una salvación que no ha peligrado durante ninguna fase y que se han adjudicado sin apuros. Ni el fichaje frustrado de Samuele Petrolito ni la salida invernal de Hayden Frear ni las lesiones de Roberto Ortiz y de Javier Trujillo, esta última de gravedad en el tramo final, ni las ausencias de ‘Peri’ han mermado el carácter competitivo.

El CV Almendralejo se ha erigido en el último reducto de la región en la división de plata tras sucumbir escalonadamente todo el cordón de seguridad que sostenía al voleibol extremeño en categorías nacionales. No existe relevo que recoja el testigo. El declive empezó a gestarse en 2022 con la renuncia del CPV por falta de apoyos tras años de inyecciones financieras enriquecidas con créditos personales de los dirigentes. La AD Cáceres fue el siguiente y el Miajadas Grupo Laura Otero, después de descender, desapareció del mapa el pasado verano dejando tras de sí la estela de un 2021 en el que luchó por ascender a la élite y disputó la Copa Príncipe.

El próximo sábado (18.00 horas) el CV Almendralejo recibe en la jornada 19 al CD Judesa de Murcia, penúltimo clasificado, partido en el que la entidad aprovechará para realizar la presentación oficial de sus equipos de cantera y se entregarán menciones especiales.