Sobre la joven asesinada en Zafra: "A Verónica se le notaba el embarazo"

El juicio que se sigue esta semana en la Audiencia Provincial de Badajoz contra los tres acusados de haber participado en la muerte del empresario Manuel Borrallo y de su sobrina Verónica Gordillo continuó ayer con la presencia de los familiares directos de los fallecidos. Entre ellos se encontraba la viuda de Borrallo, que respondió con serenidad al ser preguntada sobre las circunstancias en las que perdió la vida su esposo.

Uno de los momentos más duros de su declaración se produjo cuando tuvo que relatar cómo se encontró a su marido en medio de un gran charco de sangre y a su sobrina tiroteada de rodillas contra un mueble de la oficina. Esa escena también fue presenciada por el padre de la joven, que junto a la esposa de Manuel Borrallo fue el primero en llegar al lugar del suceso.

También pasaron por el juzgado los dos hijos de Manuel Borrallo y el marido de Verónica, que además de perder a su joven esposa se quedó también sin su futuro hijo, porque la muerte de la joven provocó el fallecimiento del varón que llevaba en su seno.

Sus familiares aseguraron que en el momento de morir, la chica estaba a punto de cumplir los cinco meses de gestación, por lo que el embarazo ya se le notaba.

En la vista de ayer fueron escuchadas las grabaciones telefónicas realizadas por los agentes de la Guardia Civil durante la investigación. Sin embargo, la reproducción del sonido fue muy deficiente y el jurado tuvo dificultades para entender lo que decían.

Para solventarlo, les entregaron un documento en el que aparecían las transcripciones. En esas conversaciones se escuchaba hablar a los familiares de los detenidos y cómo se ponían de acuerdo sobre la versión que debían mantener en caso de ser interrogados por la policía.