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Alarma en la Consejería de Sanidad...sin fundamento. La Policía Nacional ha acudido esta mañana a la sede de la Consejería en Mérida, en concreto ... a la garita de entrada, tras recibir la llamada del vigilante de seguridad. El trabajador llamó a las fuerzas de seguridad porque vio un «paquete sospechoso», en palabras de la Policía a este diario. Al vigilante le pareció «raro» el envío, que tenía como destinatario a José Luis Vicente Torrecilla, director general de Planificación, Formación y Calidad Sanitaria.
La Policía Nacional, a través de su unidad canina especializada en la detección de bombas, se presentó a los pocos minutos. Los perros hicieron su trabajo. Son los empleados habitualmente también en las operaciones antidroga. No había nada raro en ese paquete. «En realidad, ha sido un error de la empresa de la mensajería. No había nada extraño en el paquete. Ha sido una falta alarma», ha concluido la Policía a este periódico.
Una vez resuelta la incertidumbre, la normalidad ha vuelto a las dependencias de la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales.
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