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Enfado. Mucho enfado el que se palpaba hoy en Las Moreras. Este barrio de Badajoz volvió a sufrir las peores consecuencias en la ciudad de las fuertes lluvias que se registraron en la tarde del jueves. El agua volvió a entrar, un otoño más, en varias casas y negocios. «Aquí nadie se preocupa por nosotros», aseguraba mientras cobraba a una clienta Francisco Marín, propietario de Autoservicio Marín.
Cerca del mediodía, las calles continuaban llenas de barro y muchas tapas de las alcantarillas levantadas. «Fueron los vecinos los que las levantaron y trataron de desatascarlas para que entrara el agua», afirmaba Yoli González a la puerta de la casa de su madre, que también se inundó. «No se hace mantenimiento de los imbornales», se quejaba por teléfono José Luis González, presidente de la Asociación de Vecinos del barrio.
«Por aquí no ha pasado nadie del Ayuntamiento; aquí solo vienen a pedir el voto cuando hay elecciones», insistía Marín. En su tienda entró el agua, pero como tiene las estanterías algo elevadas del suelo no tuvo excesivos daños. Sin embargo, frente a este comercio, en la calle Padre Fermín Barba, fueron varias las viviendas inundadas. «Nos salía agua por los sumideros de la casa», explicaba Sara Parra con la fregona en la mano.
Al mismo tiempo, consideraba que sin la rápida actuación de los vecinos los daños podían haber sido más graves. «Fueron personas del barrio las que levantaron las alcantarillas y trataron de desatascarlas para que tragaran agua», según Parra.
Estas construcciones dan a dos calles y también les entró agua desde la rotonda del Camino Madre Vieja, que da acceso al barrio. Precisamente, a esa obra achacan los vecinos buena parte de los problemas, porque es la confluencia de la avenida y las calles Anselmo Arenas López y Padre Fermín Barba donde se acumula el agua. «Desde que abrieron aquí -señala a la rotonda Fernando Parra- nos viene el agua desde la avenida de Elvas, desde el campo de fútbol y desde la parte alta del barrio», se quejaba este vecino.
Sara Parra
Vecina de Las Moreras
Francisco Javier Cortés
Talleres Pilo
No era el único. Un grupo de personas reunidas en Ultramarinos Guerrero apuntaba en la misma dirección. «Hace falta una solución, no puede ser que esto se repita todos los años; los tubo que sacan el agua hacia el río son pequeños, ya lo avisamos cuando se hizo la obra», decía Sara Miño, desde detrás del mostrador de una tienda que ha sufrido varios desperfectos.
En este caso tenían la opción de dar parte al seguro, como en Talleres Pilo, ubicado en la avenida Málaga. «Se nos inundó el foso donde colocamos los coches y nos salía agua por los baños», detallaba Francisco Javier Cortés, responsable del negocio, que lamentaba la falta de previsión por parte del Ayuntamiento. «Cerraron la puerta del parque del río, que tiene una chapa en la parte de abajo que impedía evacuar agua. Fueron unos vecinos los que la abrieron y a partir de ahí el nivel empezó a bajar», afirmaba.
Lejos de las casas se quedó el agua en las casas aisladas de Gévora. El nivel del río no subió tanto como se temía y no llegó a las construcciones. «No hemos tenido que irnos, hemos pasado aquí la noche y la cosa ha estado tranquila», comentaba Ana belén García, que señalaba un montón de maleza que habían retirado de la cuneta del camino para facilitar la salida del agua. «Desde la crecida del río del año pasado aquí nadie ha venido a limpiar nada», criticaba.
También pasaron la noche en su casa los vecinos más próximos a la rotonda. «Pasaron los municipales a decirnos que era mejor evacuar, pero el río estaba en su cauce; no nos hemos ido», declaraba Pedro Traver, que culpa de las crecidas a la suciedad del río. «Lo que tiene que hacer Confederación es limpiarlo para evitar problemas», concluía.
Una de las imágenes más difundidas ayer por redes sociales de los efectos de la borrasca Aline en Badajoz fue la gran balsa de agua que se formó frente el hotel Río. Lo que no se había visto era por dónde buscó salida esa lluvia acumulada: una de las salas habilitadas como comedor. El agua alcanzó un palmo de altura.
Inundación
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