Los trabajadores de Catelsa-Cáceres rechazan parar la producción durante tres días

La idea propuesta por la dirección de la empresa de recambios automovilísticos era suspender la actividad ayer, el 23 y 30 de septiembre a cuenta de los días pendientes de vacaciones del año 2024, para evitar tomar otras medidas ante la caída de los pedidos por la situación de crisis del mercado del automóvil europeo.

Tal y como explicó la dirección en una nota de prensa que envió la semana pasada la situación a la vuelta de las vacaciones de verano es que la capacidad productiva estaba «temporalmente sobredimensionada», teniendo en cuenta siempre que el mercado del automóvil tiene «una gran volatilidad» y que las circunstancias pueden cambiar. El rechazo de la plantilla de estas medidas hace que, por ahora, se establezca un periodo de 'stand by' hasta la toma de una nueva decisión, según ha sabido este diario.

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La volatilidad del mercado se comprueba echando la vista atrás a hace solamente un año, cuando la empresa recuperó los niveles productivos previos a la pandemia. En los últimos años había pasado por baches importantes que le obligaron a reducir su capacidad productiva y a cerrar sus puertas uno o dos días a la semana debido al parón del coronavirus y a la crisis de los microchips.

Los trabajadores de Catelsa han tenido un intenso verano con movilizaciones por las que pretendían recuperar una parte del poder adquisitivo perdido en estos años en los que el IPC ha hecho que aumente el coste de la vida. Aunque la plantilla anunció llevar a cabo paros tras el verano, finalmente estos no se han producido.

La empresa Catelsa-Cáceres cumplió el pasado 2023 50 años desde su apertura y celebró un día de convivencia con sus 235 trabajadores, además de jubilados. La compañía, que ha dado empleo a unas 2.000 personas a lo largo de su historia y que está ubicada en el polígono de las Capellanías desde donde distribuye piezas a una docena de países como Polonia, Alemania, Portugal, República Checa, Turquía o Bélgica. En las etapas más positivas la fábrica ha llegado a producir 100 millones de piezas al año desde su planta cacereña, según una reciente estimación.